Se calcula que unos 9,5 millones de españoles realizan ya sus compras sin salir de casa, utilizando el comercio electrónico. Junto a su desarrollo –el sector lleva nueve trimestres consecutivos incrementando sus ventas en España, según los datos de la CMT -, proliferan también los delincuentes que intentan sacar provecho de los nuevos hábitos, especialmente en fechas de Navidad.
Tanto los inversores como las personas emprendedoras tienen especial predilección por proyectos de tecnologías de la información y comunicación (TIC), principalmente proyectos de Internet y e-commerce, según un informe sobre inversiones en España realizado por Rady4Ventures.
La nueva Directiva Europea sobre Derechos de los Consumidores que el pleno del Parlamento Europeo ha aprobado por mayoría absoluta (615 votos a favor, 16 en contra y 21 abstenciones) armoniza los derechos de los consumidores en cuanto a información, condiciones de entrega, periodos de reflexión, reembolsos, reparaciones y garantías en sus compras por Internet. Además, reduce los trámites administrativos que suelen disuadir a las pequeñas y medianas empresas de vender en otros países, contribuyendo al crecimiento del e-commerce en el territorio comunitario. Ciertamente, el comercio online nacional ha aumentado enormemente en la UE los últimos años, pero no así el transfronterizo, hecho que las autoridades comunitarias han achacado a la disparidad de normas.