Se estima que para 2014 el vídeo supondrá más del 90% del tráfico mundial de Internet, lo que equivale a multiplicar por cuatro el tráfico IP entre 2009 y 2014, según un informe de Cisco. La explosión del vídeo y el surgimiento de dispositivos móviles capacitados para transmitirlo online (teléfonos inteligentes, PADs, netbooks, sistemas de telepresencia,…) explican en parte esta tendencia generalizada en el mundo desarrollado. Y no podemos olvidar los servicios de contenidos multimedia a la carta que cuentan con millones de usuarios en el mundo, que se ha hecho esperar pero acaba de despegar.
Más del 70% de los departamentos de TI esperan actualizar sus websites en los próximos 24 meses para soportar el nuevo protocolo de Internet IPv6, según un reciente sondeo realizado por la edición estadounidense de Network World entre 210 responsables de TI corporativos (en concreto, un 13% ya lo han hecho, un 25% han iniciado el proceso de migración y un 27% planea iniciarlo en los próximos 24 meses). Además, el 65% de las empresas prevé introducir también IPv6 en sus redes internas en ese mismo período de tiempo.
A finales de este mismo año, IPv4 e IPv6 ya estarán conviviendo, puesto que los nuevos internautas accederán a Internet con el nuevo protocolo. Evitando el alarmismo, pero animando a empresas y usuarios a iniciar ya la transición al nuevo protocolo de la red, el director general de Interoute, Diego Matas, ha analizado el significado del Día Mundial de IPv6, que hoy se celebra con una gran prueba global de la nueva tecnología.
En febrero pasado, la IANA (Agencia Internacional de Asignación de Números de Internet, por sus siglas en inglés) entregaba el último bloque (33 millones) a la organización encargada de asignar IP en Asia, un mercado que no tardará en consumirlas. Sin direcciones IP, no hay nuevos accesos y la brecha digital podría ir en aumento. Para evitarlo, a principios de los 90 nació la versión 6 del protocolo (IPv6), una revisión del Protocolo de Internet que eleva a 1028 el número de direcciones de Internet posibles, es más seguro y favorece la movilidad. Pero lo cierto es que no ha tenido despliegue a nivel global, a pesar de los esfuerzos de la IANA, los Gobiernos y organizaciones no lucrativas.
Mientras se asignan los últimos bloques de direcciones IPv4 conviene preguntarse si las alarmas sobre el fin de Internet son una exageración o si los administradores de la red y los CIOs deberían tomarse más en serio el cambio a IPv6.
El director ejecutivo del Registro Americano de Números de Internet (ARIN) ha señalado que cualquier transferencia de direcciones IPv4 de una organización a otra debe ser compatible con la política establecida por ARIN. De esta manera ha zanjado la polémica abierta por la decisión de Microsoft de comprar un bloque de más de 666.000 direcciones IPv4 a Nortel por 7,5 millones de dólares.
Grandes compañías de Internet como Microsoft, Google, Facebook o Yahoo! ya se han comprometido a migrar sus principales servicios a IPv6 en los próximos meses. IPv6 sustituye a IPv4, el protocolo de Internet que ya está llegando a su fin con el reparto inminente de las últimas direcciones disponibles.