Los CIO se enfrentan cada vez con más frecuencia a tareas de gestión tales como encontrar, retribuir y retener personal con la capacidad y preparación adecuadas para soportar las necesidades del negocio y sus constantes cambios.
Cuando un profesional de TI altamente cualificado tiene que emplear su tiempo en actividades menores o en resolver problemas causados por errores humanos, no puede dedicarse a trabajar en proyectos vitales para el negocio. Además, si carece de una visión sobre la estrategia de negocio, tampoco podrá establecer prioridades.
De acuerdo con un informe realizado por CIO y BMC Software, las organizaciones de TI se están orientando cada vez más hacia la gestión del servicio de negocio (Business Service management, BSM), de forma que se asigna el trabajo según la prioridad que requieren las necesidades del negocio. De esta forma, lo primero en recibir atención será lo que ofrece un resultado inferior al previsto.
El modelo BSM favorece la visibilidad, la alineación, las prioridades y la automatización de servicios rutinarios, como pueden ser las actualizaciones masivas de la configuración de los equipos. Así, se reduce el riesgo de errores que pueden provocar cortes en el suministro de red, entre otros muchos problemas, se activa la respuestas del workflow, que pueden acortar el tiempo medio de recuperación (MTT R) y se deja personal libre para que pueda centrarse en proyectos estratégicos dirigidos a alinear los objetivos de TI con los del negocio.
BSM promete a las organizaciones de TI tantas vías como necesiten para gestionar sus tecnologías de la información desde la perspectiva del negocio. A medida que crece el interés, más empresas se plantean emprender una estrategia en este sentido, pero ¿por dónde empezar? Sin duda, por lo que necesita más mejoras, buscando siempre un enfoque transparente y flexible.