Virtual Data Center

El desarrollo de cloud computing y la necesidad de las empresas de reducir sus costes y la complejidad de la gestión de infraestructuras TIC son dos de los grandes impulsores de un servicio nuevo y cada vez más demandado: el Centro de Datos Virtual.Frente al modelo tradicional de compra, despliegue e instalación de servidores y aplicaciones en la propia oficina, que suele dilatarse entre tres y nueve meses según su complejidad, el Centro de Datos Virtual incluye toda la infraestructura necesaria y puede estar en funcionamiento en apenas unas horas. Además, al tratarse de un servicio alojado en la Red, las empresas pueden implementar nuevas infraestructuras de almacenamiento e informática virtual para utilizar sus aplicaciones empresariales en cuestión de minutos.

Esta fórmula aporta simplicidad y seguridad a la nube corporativa y evita tener que elegir entre las comodidades de la nube pública y la seguridad de la nube privada, ya que incluye las ventajas de ambas. A la hora de contratar el servicio, conviene tener en cuenta aspectos tales como:

• Si el servicio virtual datacenter es fácilmente escalable y ofrece la flexibilidad suficiente para poder utilizar los servidores que se necesiten y durante el tiempo que se necesiten.
• Cómo se realiza la migración y quién elige el ritmo de cambio y los servicios que se trasladarán al centro virtual.
• La modalidad de facturación que se va a aplicar: fijo mensual, pago por uso o pago por el paquete de recursos.
• Cómo se gestiona la seguridad.
• El tipo de redes que van a utilizarse: públicas, privadas o mixtas.
• Quién gestiona el servicio y se encarga del mantenimiento.
• Los posibles gastos extras.
• El SLA.

Gracias a la virtualización del centro de datos, no se necesitan infraestructuras físicas dedicadas para cada aplicación. Cada una de ellas tiene una infraestructura virtual que funciona como si se tratara de una infraestructura física tradicional, pero con la ventaja de poder ampliar o disminuir sus recursos de forma sencilla a través del portal de gestión. Y, lo que es más importante, sin necesidad de adquirir nuevo equipamiento, ya que se aprovecha al máximo toda la infraestructura.

Este tipo de soluciones son particularmente atractivas en situaciones que requieren un gasto importante para la compra, instalación y/o mantenimiento de servidores propios en la puesta en marcha de un negocio o servicio; también para la realización de pruebas y simulaciones, como servicio de respaldo en caso de contingencias y para atender picos de demanda en empresas y sectores con una marcada estacionalidad.